En un hecho inédito y sin antecedentes en la provincia, el Intendente de la localidad de Contralmirante Cordero Gustavo Pita decidió despedir a todos los Delegados de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) sin que existan causas que justifiquen semejante proceder.
«Estos despidos son absolutamente sorpresivos y aparecen fuera de todo contexto. No hay antecedentes de que alguien decida despedir a todos los delegados de un Sindicato. Esta determinación del Intendente rompe la paz social que tan trabajosamente veníamos construyendo», advirtió Rodolfo Aguiar, Secretario General de ATE y CTA-A Río Negroy completó: “No existen razones políticas, ni jurídicas que puedan fundar estas cesantías. Pareciera que, como perdió todas las causas en la Justicia, ahora quiere venganza y ocasiona daños a los trabajadores y a sus familias».
Las cesantías determinadas por Pita se producen a una semana de que la Cámara Laboral de Cipolletti obligara a esta Municipalidad, mediante la firma de un acta, a reconocer oficialmente al Sindicato y comenzar a efectuar los descuentos en carácter de cuota sindical a todo el recurso humano afiliado, además de convocar a ATE para discutir salarios y condiciones de empleo.
“Es insólito este proceder del Intendente de Cordero, que intenta golpear al Sindicato y dejar en la calle a trabajadores que son sostén de familia. Pero desde ATE no nos vamos a quedar con los brazos cruzados. Durante esta semana vamos a definir los pasos a seguir”, adelantó Dora Fernández, Secretaria General de ATE Seccional Norte.
Sin dudas que esta insensible decisión del Intendente de echar a los representantes sindicales produce de manera directa el rompimiento de la «paz social» y hace recrudecer un durísimo conflicto que parecía haberse superado ya hace bastante tiempo.
La forma sorpresiva de actuar de Pita y los despidos producidos fuera de todo contexto,darían cuenta de la bronca o impotencia que este jefe comunal siente a partir de haber sido derrotado en cuanta instancia judicial participó, sea esta penal o laboral, considerando que nunca pudo obtener aval legal para el grave proceso de persecución política e ideológica que inició en el Municipio bajo su mandato.
