El gobierno de Alberto Fernández y Cristina Fernández no hace más que faltar el respeto a la ciudadanía y más aun a quienes se encuentran en estado de vulnerabilidad.
Ante el salto de la inflación no se les cae otra idea que un bono o repartir alimentos. Ante los problemas de la salud primero instalo el miedo hasta debajo de la alfombra y luego como si fuera el salvador ofrece vacunas.
Ante la falta de educación que es importante saber que es parte del programa de gobierno comunista del peronkirchnerismo gobernante, plantea educación virtual a sabiendas que en el país el 60 % de los estudiantes no cuentan con las herramientas necesarias para conectarse, lo que sumado a los maestros y profesores con sueldos paupérrimos y que tienen que hacerse cargo de la virtualidad hace de la gestión del Estado un mal chiste.
Ante el urgente y además necesario plan de salud en pandemia el estado junto a los gobiernos provinciales y municipales a cuentagotas miran los hospitales y las salas de primeros auxilios donde no han puesto absolutamente nada de inversión y los trabajadores de la salud parecen los jinetes del Apocalipsis sin contar con la responsabilidad de quienes deberían gobernar.
Todo esto nos muestra un panorama general critico, en un país totalmente empobrecido, donde quieren instalar la guerra contra el capitalismo, mientras aumentan sobremanera su propio capital los sectores gobernantes que mantienen dormida a la Republica y les quieren hacer creer a los desocupados, a los trabajadores subocupados, y a quienes ostentan una estabilidad laboral casi imaginaria que los productores, los comerciantes, los sectores generadores de divisas e ingresos, los que pagan impuestos, son los enemigos y los responsables de la catástrofe Argentina.
Un solo plan es el correcto y el único posible para que Argentina salga adelante y es producir, generar trabajo genuino. No puestos para la militancia.
Si sigue utilizando los fondos de ANSES para continuar empobreciendo a los argentinos y farreándose los ingresos de la Republica, lo único que se lograra es ingresar al camino de Cuba, Venezuela, Rusia, China que no tienen ciudadanos sino esclavos, donde una pequeña elite se da la gran vida y el resto sufre los arrebatos del poder que se eterniza por décadas sin ni un tipo de derecho humano para la sociedad.
Lo muestran muchos sectores de izquierda, que no por ser de izquierda son comunistas, y mantienen en pie los reclamos de trabajadores y desocupados que muestran la realidad cada día en hospitales, escuelas, municipios, minas, ferrocarriles, fábricas, universidades y más.
La generación de trabajo genuino y la producción es la única salida.
Argentina produce gas, electricidad y petróleo para exportar y le compra a los países “amigos” del peronkirchnerismo comunista al doble de su valor y lo pretende pagar con territorio argentino a esos países mientras cientos de miles en la Argentina sufren la falta de un pedazo de tierra para construir su vivienda.
Argentina produce carne, leche, frutas, verduras, maíz, y se da el “lujo” de dejar morir niños de hambre… pretende hacer creer que los culpables son los productores porque son capitalistas pero no se conoce chacra, campo, tambo, del estado que produzca absolutamente nada, solo cobra impuestos, “el Estado no produce nada mas que militantes”
Hace falta un programa de gobierno que no pretenda generar injusticia y desigualdad, que no limite los derechos humanos, que trabaje y que resalte los valores y la dignidad ante todo.
Hace falta un gobierno que no sea ave de rapiña. Que no pretenda impunidad y lujuria política.
Hace falta un gobierno y un Estado que sean capaces de sumirse a la Constitución Nacional, salvar la Republica, mantener firme los pilares fundamentales como Educación, Salud, Trabajo, Justicia… que cada uno de los ciudadanos sea igual ante los derechos humanos y terminar con esta casta de rapiñeros que solo piensan en ellos con derechos y sin obligaciones.
La salida parece invisible, pero esta ahí, ellos la escondieron debajo de la alfombra como pretenden hacer con todos sus delitos.
Es sumamente importante lograr el despertar ciudadano.
Argentina tiene todo para resurgir y que nadie quede fuera.
Crecer y ser un país que primero ayude al interior, se posicione en el mundo y participe del crecimiento mundial.
Salvemos la Republica,
tenemos las herramientas,
seamos ciudadanos y pensemos
con el cerebro para lograr
la nueva Independencia,
esta vez hay que independizarse
de “la corrupción”.
